Ya No Tenemos Nada Que Decirnos

Sobre un colchón que fermenta fluidos sexuales, rodeada de gente demasiado manoseada, escribo esto. Y así como vino se fue el amor en una nube verde de humo de marihuana. El enamoramiento murió de un sólo comentario, de la mano y con una sonrisa a favor de la maldad. Ya no quiero querer a alguien malo, a uno de esos seres asquerosos que ya no saben querer. La desilusión se ha vuelto algo cotidiano. Un beso es sólo un beso. Un mes es sólo un mes. No quiero querer a un pobre imbécil que me toca la espalda con la luz apagada. Porque me enferman tus enfermedades venéreas, ya estoy harta de tu promiscuidad que se para en todas las esquinas de Santiago. Yo soy una perra fácil. Yo siempre he sufrido por imbéciles que no contestan. La estupidez me persigue. Me persiguen profilácticos con forma de corazón. Me persigue la Iracema con sus pocas ganas de surgir y salir de esta mediocridad profunda que me provoca arcadas. Acá el amor es una cacha, es tan fácil como abrirse de piernas y "como un perro echarle carne a un tajo". No quiero que-me-per-vier-tas-por-msn. No quiero acostarme contigo. No quiero acostarme con nadie. Te encuentro repugnante. Te olvidé y ya no te quiero. Porque eres un perro. Porque eres un perro. Yo no soy tonta, yo sólo no hablo, escucho y pienso. Yo no soy una perra fácil que puedes llamar todos los viernes en la noche para penetrarle lo poco y nada que le queda de dignidad. Yo prefiero salir, no busco a alguien que esté caliente, quiero a alguien que quiera matarme y que se mate por mi. Espero que llegue el verano para pasar tres meses sin saber de ti. Te odio mientras me ayudas. Odio la indiferencia con que me dices que me corra para que cierres la puerta. Tú quédate con tu puerta y tus muy bien logradas acciones internas, que así como vino se me fue el amor.

Mi odio hacia la Iracema crece y crece con el pasar de los segundo, con nuestra escena que no avanza, con las acciones que no existen, con la Iracema que no llega y que no llega y que no llega...

Ya no puedo escribir casi nada, porque le he dado a toda la gente mi blog.

La María Carolina es la visita más emocionante que he tenido ultimamente. Que hubiera venido a mi casa fue lo mejor que me ha pasado. Ojalá la energía de juego hubiera estado hoy en la sala con Lagreze. Si mamita, Lagreze es un hombre, y vaya que hombre.




Si quieren déjenme un mensaje, hoy me gusta leer.


"Z:¿Y tú qué querías decirme?
A: Ahora que te vas ya no tiene importancia.
N: ¿Qué quería decirle?
G: Que ahora que te vas ya no tiene importancia.
N: ¿Eso es lo que quería decirle?"


Me pasó otra coincidencia para guardarla debajo de la almohada y espantar a los ángeles que me quieran comer y a todos los arcángeles que me quieran violar.